Hija de un entrenador, Jackie Kallen (Meg Ryan) se cri? entre las cuerdas en un gimnasio del centro de Detroit, en compa??a de su t?o que tambi?n era boxeador. Jackie observaba maravillada los esfuerzos de muchos j?venes para convertirse en campeones y so?aba con que alg?n d?a entrar?a a formar parte de ese deporte que llevaba en la sangre. Ahora, a los 36 a?os, Jackie se encuentra dispuesta a proseguir la tradici?n familiar. Est? cansada de hacer de secretaria ejecutiva de Irving Abel (Joe Cortese), director del Cleveland Coliseum, cuando los dos saben que es ella la que realmente dirige el coliseo. Tratando de introducirse en el mundo del boxeo, Jackie pasa mucho tiempo en el D?Agostino, un tugurio de mal ambiente famoso por su alcohol de garrafa y sus filetes sanguinolentos. Tras tomar unas copas con el reportero deportivo televisivo de moda de Cleveland, Gavin Reese (Tim Daly), Jackie acaba metida en una discusi?n con el magnate box?stico del Medio Oeste Sam La Rocca (Tony Shal-houb). Para ponerla en evidencia, La Rocca le vende por un d?lar el contrato de uno de sus luchadores... pero es justamente lo que vale Devon Greene (Tory Kittles), que se interesa m?s por fumar crack que por el boxeo. Pero el d?lar de Jackie acaba rindi?ndole dividendos. El d?a que va al piso de Devon para decirle que es su nuevo manager, llega justo cuando Luther Shaw (Omar Epps), el mat?n del hombre que le pasa la droga a Devon, est? propin?ndole una paliza. Jackie se da cuenta enseguida de que es Luther, no Devon, quien tiene potencial para convertirse en campe?n. Jackie paga su fianza, le convence para que pruebe fortuna en el boxeo y luego, con la ayuda de Felix Reynolds (Charles S. Dutton), un veterano entrenador al que saca de su retiro, transforma a Luther, que pasa de ser un gamberro condenado a acabar en la c?rcel a convertirse en un p?gil bien entrenado. Y al mismo tiempo Jackie se convierte en uno de los managers femeninos de mayor ?xito en la historia del boxeo.